Nuestra visión
Visionamos colegios con equipos de docentes emocionalmente inteligentes, capaces de ayudar a sus alumnos a:
- descubrir su grandeza como personas (talentos, pasiones, retos)
- ser conscientes de sus emociones: darse cuenta de si una emoción les está impidiendo dar lo mejor de sí mismos y saber manejarla, tomando decisiones responsables,
- resolver conflictos con empatía y asertividad,
- desarrollar hábitos emocional-mente saludables (atención plena, gratitud, pensamiento positivo y creatividad)
- desarrollar habitos social-mente saludables (escucha, ayuda, cariño)
En definitiva, el profesor tiene en sus manos la oportunidad y la responsabilidad, de "liberar" el talento, el potencial de sus alumn@s y desarrollar su capacidad para integrar razón-emoción-voluntad en sus actos (pienso, siento, decido y actúo).